martes, 24 de enero de 2012

BREVE PERO SENTIDO HOMENAJE AL TAMAL, por Diego Cárdenas



BREVE PERO SENTIDO HOMENAJE AL TAMAL, por Diego Cárdenas



Son muchos los que han tratado de tocar mi corazón haciendo uso de sensiblerías insulsas como el mail de la chica que falleció al ser arrollada por un bulldozer en medio de una protesta pacifica ( creo que nadie se pone delante de un bulldozer si no se le cruza por la cabeza que en algún momento puede ser arrollado, así que ella sabía lo que podía pasar al igual asumo que sus compañeros, mismos que ahora la utilizan como un conveniente símbolo de la lucha y la resistencia ) aquel del señor sin manitos ni piernitas que trata de enseñarnos a levantarnos pese a las dificultades (gran cosa, las tortugas lo hacen todo el tiempo Y DE ESPALDAS!! Por qué nadie le da crédito a las tortugas?? Será acaso que necesitan de una peste como la del pollo, pato o cerdo para que alguien las empiece a tomar en cuenta?) o incluso el del señor que toca guitarra con los pies (Alfredo Gutierrez toca el ACORDEÓN con los pies y a nadie se le ha ocurrido hasta esta fecha llevarlo a tocar delante del papa), máxime cuando todo lo que se necesita para arrancarme unas cuantas lágrimas es una película de Disney ( la mas reciente de ellas UP si a alguien le interesa).

Pero con toda sinceridad no hay cosa que me genere mas desconsuelo, aprehensión y física tristeza que estar lejos de mi tierra en el día del tamal. Sí, el tamal -aquel amasijo informe de tradición gastronómica que envuelto en hojas de plátano, ondea orgulloso al viento como el estandarte por excelencia de la turba tolimense- tiene un día oficial , decretado por el gobierno departamental, ignorado por el nacional y celebrado con jolgorio por el pueblo a todos sus niveles, porque aceptémoslo, cualquiera que haya comido tamal al menos una vez en su vida jamás podrá tener un estrato superior al 2 sin importar su credo , raza o condición económica actual.(gracias a Dios y a mucho honor).

El tamal, que entre los pliegues de sus grasosas hojas acuna diez mil historias de familias enteras que de el derivan su sustento, que con su característica cabuya une con fortísimos lazos de identidad a todo un pueblo, que con el agua verdosa que deja en el plato en el que ha sido consumido o la sopa espesa que queda en el fondo del “indio” en que ha sido preparado, baña sin excepción a todos los hijos pródigos que, como este servidor, se encuentran lejos de su vaporoso abrigo en este momento , constituye la fuente de mis mas profundos pesares el día de hoy.

Y es que el hecho de vislumbrar que mañana a en la mañana estaré pensando en consolidados, declaraciones de exportaciones y chicharrones logísticos, mientras mis económicamente improductivos pero mas felices coterráneos estarán devorando sin tregua miles y miles de tamales por todo el territorio Tolimense, es una idea que me llena de congoja. Tamal humeante con chocolate y pan, preferiblemente consumido en un improvisado y antihigiénico cambuche de la quinta hacia arriba y como preámbulo al consumo de una cantidad industrial de alcohol.

Tamal Tolimense de mis anhelos que en definitiva jamás podrá ser reemplazado por un tamal Valluno ni mucho menos por uno rolo, con todo el respeto que me merecen estas dos bellas regiones. Porque comerse un tamal tolimense el día del tamal es más que degustar la incomparable sazón de mi tierra, es también degustar un poco del peatón local que deambula en pantaloneta por estas fechas, del ocasional rolo insolado que baja al pueblo para las fiestas, de la riña pasional que estalla en medio del desfile, es saborear al raponero que hace su agosto en junio aprovechando el desorden, al niño explotado que recoge latas durante todo el día, al jinete que en avanzado estado de beodez le echa el caballo a la gente, la leyenda urbana del terrorista que chuza con jeringas infectadas a los desprevenidos parroquianos en medio de los tumultos. Comerse un tamal Tolimense el día el tamal, es algo que solo se puede experimentar a plenitud en Ibagué.

Invito a todos los paisanos que se encuentren en cualquier región del país diferente a nuestra natal Ibagué a no dejar pasar por alto tan magnánima ocasión y consumir mañana, en algún punto del día, lo mas cercano a un buen tamal tolimense.

Mil gracias,

DIEGO CÁRDENAS

1 comentario:

  1. Originalmente publicado en FACEBOOK el miércoles, 24 de junio de 2009 a la(s) 1:35

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